best microsoft windows 10 home license key key windows 10 professional key windows 11 key windows 10 activate windows 10 windows 10 pro product key AI trading Best automated trading strategies Algorithmic Trading Protocol change crypto crypto swap exchange crypto mcafee anti-virus norton antivirus Nest Camera Best Wireless Home Security Systems norton antivirus Cloud file storage Online data storage
tes

Torre de Babel Ediciones

Bergson – Psicología – Causalidad y conciencia

TORRE DE BABEL EDICIONES

Portal de Filosofía,  Psicología y Humanidades

 

Diccionario Enciclopédico Hispano-Americano

Selección de artículos de una de las más importantes y clásicas Enciclopedias en lengua española

 

Curso de Psicología

Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED)

 

Conexionismo

Introducción al nuevo enfoque de
psicología cognitiva

Vocabulario de psicología

Explicación de los principales conceptos, tesis y escuelas en el área de la Psicología

 

Mitología griega e historia de los grandes hombres de Grecia

Sencilla exposición de la mitología griega, historia de los héroes, semidioses y hombres célebres griegos. Por Fernán Caballero.

 

Historia de la Filosofía

Edición digital de la Historia de la Filosofía de Jaime Balmes

 

Historia de la Filosofía

Explicación de la filosofía de los principales pensadores, resúmenes, ejercicios..

 

Diccionario de Filosofía

Breve definición de los términos y conceptos filosóficos más importantes

 

Biografías y semblanzas

Vidas y referencias biográficas de los filósofos y pensadores

 

Índices y sumarios

 Índices y sumarios de las obras clásicas del pensamiento

 

En la red y en español

Directorio y breve descripción de revistas de filosofía en español editadas en la red

 

Razón vital

Foro telemático dedicado a José Ortega y Gasset

 

Vocabulario de economía

Principales conceptos de esa ciencia. Por el catedrático de economía José Manuel Piernas Hurtado

 

Legislación educativa y cultural

 

 


PSICOLOGÍA CONTEMPORÁNEA

J. Vicente Viqueira

Índice general

J. Vicente Viqueira – La Psicología Contemporánea                            Capítulo VI – IDEAS PSICOLÓGICAS DE HENRI BERGSON
 

CAPÍTULO VI
Ideas psicológicas de Henri Bergson ) () () () () (

Henri Bergson - Causalidad y concienciaBergson y la psicología introspectiva francesa – La significación de Bergson – Plan – La intuición – La conciencia – Análisis de los datos inmediatos de la conciencia – La conciencia no es cantidad – La conciencia, multiplicidad cualitativa – La duración pura – Causalidad y conciencia – Resumen – Alma y cuerpo (materia y memoria) – El cerebro, causa del pensar – Crítica del paralelismo – El cerebro, órgano de acción – Inmortalidad personal y parapsicología – La conciencia y la vida – La personalidad – Influjo de Bergson – Bibliografía

La psicología asociacionista, y en general casi toda la psicología, supone una relación de causalidad entre los estados de conciencia (unos son causas de otros), y entre estos estados y sus factores físicos. Partiendo de estos supuestos, la existencia de la libertad de la voluntad es, según Bergson, imposible, ya que para él libertad de la voluntad significa lo mismo que indeterminación, ausencia de causalidad. Ahora bien; Bergson intenta probar (y esto es lo que aquí nos importa) que el concepto de causalidad no es aplicable a la vida psíquica, a la conciencia, y que ésta ofrece una organización no causal, sino indeterminada, y por lo tanto imprevisible; por consiguiente somos libres.

La total determinación por causas, da lugar a lo que llamamos determinismo. El determinismo puede ser físico, a saber: determinación por estados fisiológicos, cerebrales; o psíquico, a saber: determinación de los estados de conciencia por otros estados de conciencia. Después de haber hecho esta distinción, afirma Bergson que ambos tipos de determinismo se reducen en el fondo a uno, ya que en el determinismo físico se suponen fenómenos psíquicos paralelos a los procesos fisiológicos, y realmente se trata en dicho determinismo de buscar, mediante él, una base sólida para la determinación causal de los fenómenos o estados mentales, base que se encontraría, precisamente, en los estados cerebrales concomitantes; lo que ya indica que las condiciones de la causalidad no existen en lo psíquico. En lo que sigue expondremos cómo Bergson pretende mostrar que nada obliga a concebir los estados mentales como sometidos al nexo causal natural, que las condiciones de la causalidad no se dan en lo psíquico y que los actos humanos son imprevisibles, es decir, indeterminados.

Partiendo del determinismo físico, se podría pensar que el espíritu se halla encajado en el nexo causal natural. Esto querría decir que la vida mental se hallaba sometida al principio de la conservación de la energía. Ahora bien; primeramente, este principio dice que algo se conserva constante; pero como el espíritu no es algo que se conserve constante, sino algo que se hace, que se crea constantemente, el principio de la conservación de la energía no le es aplicable (20). Además; de aquí no saldría ninguna lesión de los principios de la ciencia de la naturaleza, ya que el principio de la conservación de la energía es sólo un supuesto que admitirá modificaciones si la experiencia las exige. Con esto queda descontada asimismo toda tentativa energetista.

Pasamos ahora de lleno al problema de la determinación causal de la voluntad, a la organización de la conciencia, y para ello debemos dirigimos directamente a las concepciones del determinismo psíquico. Sabemos ya, porque antes ha sido expuesto, que no se encuentra en la conciencia una multiplicidad numérica, cuantitativa, de elementos que se agregan y disgregan. Precisamente lo último es lo que suponía el asociacionismo, que veía en la conciencia un análogo del atomismo de la ciencia de la naturaleza; es decir, ideas simples combinándose en virtud de las leyes de la asociación. Ahora bien; para la causalidad son precisos factores, unidades independientes que se determinen los unos a los otros; esto sucede de hecho en la naturaleza. En la conciencia no hay, como sabemos, tales factores sustantivos que puedan determinarse entre sí. Por lo tanto, en la conciencia no puede hablarse de causalidad. Es sólo una figura retórica el decir que una pasión o un deseo determinan la acción. La pasión y el deseo no son unidades activas, sino sólo momentos, aspectos del estado total del sujeto. Por lo tanto, lo único que podemos decir es que el estado del sujeto ha dado lugar a la acción, ha terminado en una acción. Tenía que ser forzosamente así, ya que la causalidad natural supone multiplicidad y ésta espacio, y los estados mentales no están en el espacio.

En relación con esto se halla el que los actos humanos no puedan preverse, sean imprevisibles. La causalidad de la ciencia natural no sólo requiere el espacio porque éste únicamente proporciona una multiplicidad de elementos, sino también porque se trata en dicha ciencia de derivar ciertas simultaneidades geométricas de otras, en un orden necesario lógico, aproximándolas (mediante construcciones simbólicas) a identidades, aunque sin lograrlo totalmente. La causalidad natural sustituye las relaciones de sucesión por relaciones de coexistencia, se da todos los hechos de una vez, los hace presentes, y así es como logra predecir, prever, el futuro. Para la causalidad natural el tiempo, la duración, no cuenta. Por ejemplo: en la predicción de un eclipse, hacemos transcurrir con el pensamiento las diversas posiciones sucesivas de los astros de modo que el tiempo que las separa se reduce a nada; operamos, pues, con simultaneidades. Por el contrario, el espíritu, la conciencia, es esencialmente duración; el tiempo en él es esencial, no puede suprimirse sin suprimir su existencia. Consecuencia inmediata: la previsión de sus estados, de los estados mentales, es imposible; dicho positivamente: son indeterminados. Sin embargo, Bergson se encuentra con que podemos o pretendemos poder predecir la conducta posible de un hombre o de un grupo social, y lo resuelve diciendo que aquí no hacemos más que juzgar del pasado de los hombres y pretender que el futuro será igual a éste. Lo que Bergson no dice es por qué acertamos tan a menudo; claro está, sólo con respecto a ciertas líneas generales de dicha conducta.

La dificultad que aquí se presenta proviene de que Bergson no se representa más ley ni más causalidad que la de la ciencia natural. Ahora bien; es evidente que el complejo de cualidades y de aspectos de la conciencia pueden desarrollarse según ley, y que esta ley no es contraria a la libertad, no necesita ser impuesta desde fuera, sino que nace del sujeto mismo; es ley de espontaneidad. La libertad no tiene, por otra parte, más sentido que éste de la espontaneidad. Además, la concepción que tiene Bergson de la causalidad es antropomórfica (acción de un sujeto); sin embargo, desde David Hume sabemos que causalidad significa sólo sucesión constante, sucesión según ley, y esto es indudable que lo hallamos en el espíritu.

Después de esta nota crítica, resumamos en pocas palabras el resultado obtenido por Bergson en su análisis de los datos inmediatos de la conciencia. Éste es el siguiente: el espíritu no es cantidad ni multiplicidad cuantitativa, ni está sometido a la ley de causalidad; por el contrario, el espíritu, la conciencia, son cualidades que se compenetran en continua creación indeterminada (duración pura). Ahora bien, según Bergson, quien dice memoria dice duración pura (identificación inexacta, porque un proceso, de pensar por ejemplo, dura y no es memoria).

__________

(20) Esta concepción, como se recordará, pertenece a W. Wundt, que contrapone la síntesis creadora al principio de la conservación de la energía.

) () () () () (

J. Vicente Viqueira – La Psicología Contemporánea                            Capítulo VI – IDEAS PSICOLÓGICAS DE HENRI BERGSON

  © TORRE DE BABEL EDICIONES – Edición: Isabel Blanco y Javier Echegoyen – Aviso legal y política de privacidad
 
tes