DICCIONARIO ENCICLOPÉDICO HISPANO-AMERICANO(1887-1910) |
ANDRÓMEDA, hija de Cefeo y de Casiopea (mitología griega)ANDRÓMEDAMitología. Hija de Cefeo, rey de Etiopía, y de Casiopea. Su madre cometió la imprudencia de mostrarse orgullosa de la belleza de su hija, que era tal que sobrepujaba a la de las Nereidas. Ofendido el dios Neptuno por esta arrogancia, envió un monstruo marino para destruir el país. El oráculo de Amón prometió que cesaría el azote si Andrómeda se entregaba al monstruo y Cefeo hubo por esto de encadenar a su hija a una roca junto a la orilla del mar; en tal disposición la encontró Perseo, quien la salvó dando muerte al monstruo. El héroe había prometido al rey libertar al país de la cólera divina si Andrómeda, salvada por él, le era dada en matrimonio. La unión se efectuó; mas como la joven estaba prometida a Fineo, el día de las bodas se entabló terrible lucha entre Perseo y Fineo, pereciendo éste con todos sus aliados. Andrómeda, después de su muerte, fue colocada entre los astros. Los monumentos ofrecen el asunto de Andrómeda atada a la roca y Perseo venciendo al monstruo para libertarla. No han dejado las Bellas Artes de aprovechar este hermoso mito. En las pinturas descubiertas en Pompeya y Herculano se encuentra este asunto, que pasó desde el arte antiguo al de la Edad Media obteniendo gran éxito, sobre todo desde que la restauración del arte clásico en Italia hizo resucitar las fábulas griegas que tanto se prestan para cierta clase de composiciones. En el Museo de San Petersburgo existen dos lienzos de Rubens y el Ticiano. En Dresde uno de Lucas Jordán. En Gli Uffizi de Florencia tres, originales de Piero di Corsino, Zucaro y el Veronés. En Roma varios del Guido, Aníbal Carracci y Quercino. La colección Stanley de Londres posee una obra notable de Poussin. En el Museo de Madrid existe un cuadro de Jordán (número 221) imitación de la escuela veneciana y el célebre de Rubens. La liberación de Andrómeda ha sido presentada también en la escultura produciendo obras dignas de atención, como las que existen en el Museo Chiaramonti de Roma, y el grupo de Doner del ayuntamiento de Berlín. Con el titulo de Andrómeda y Perseo existe en el Museo del Prado un cuadro de Rubens, numero 1584. Las figuras son de cuerpo entero tamaño natural. Perseo armado de punta en blanco como un caballero del siglo XVI, desliga presuroso las ataduras que sujetan a la bella Andrómeda sobre una roca. La hija del rey de Etiopía, enteramente desnuda, dirige la mirada a su libertador, sobre el cual revolotean unos amorcillos. El fondo del cuadro le constituyen unas playas por las que galopa el caballo Pegaso. La figura de Andrómeda es un prodigio, no sólo por su actitud graciosa y elegante, sino por la manera magistral como está pintada. Difícilmente se encontrará entre las academias de Rubens otra que mejor exprese las palpitaciones de la carne. La composición ofrece un conjunto agradable y demuestra el gran genio de su autor, que supo vencer las dificultades que ofrece el dibujo de dos figuras de pie en un lienzo alto que ancho. Procede este cuadro de la colección de Carlos III en el Real Alcázar de Madrid. Con el mismo asunto la escultura ha producido un grupo en mármol, de P. Puget (Museo del Louvre). Esta obra maestra del escultor de Luis XIV representa el momento en que Perseo, después de matar al monstruo que iba a devorar a la bella Andrómeda, la liberta de sus cadenas ayudado por unos amorcillos. Tiénese este grupo por una de la mejores obras de la estatuaria francesa del siglo XVII, y en efecto es admirable, no sólo por el movimiento de las figuras y su expresión, sino porque el mármol está trabajado con tal maestría que hace el efecto de la blancura de las carnes. Sólo se ha reprochado a la obra de Puget la desproporción que existe entre Perseo y Andrómeda, pues mientras ésta parece más pequeña que el natural, aquél resalta de una estatura gigantesca; Puget se excusó diciendo que su discípulo Veyrier, que le había ayudado, era el culpable, pero que en último caso la heroína tenía el mismo tamaño que las señoras más bellas de la corte de Luis XIV. Al pie del grupo se lee una inscripción, en la que consta que se concluyó en 1684 cuando su autor contaba la edad de sesenta y dos años. |
Diccionario Enciclopédico Hispano-Americano (vol. 2, pág. 197 – editado: 27-09-2007) ANDRÓMEDA, esposa de Perseo (mitología) |