ANTINOO, joven esclavo, y ANTINOOS juegos con los que el emperador Adriano honraba al joven (biografía y arqueología)
ANTINOO, ANTINOOS
– ANTINOO:Biografías. Joven esclavo bitinio de singular hermosura; vivió en tiempo de Adriano, emperador que prefería la hermosura de este favorito a todos los encantos del bello sexo. Sospéchase que les unía también algún lazo religioso. Antinoo se ahogó el año 132 d. de J.C. en el Nilo, cansado suele decirse de servir de instrumento a los placeres unisexuales de su señor, o por accidente fortuito. Otros afirman que se sacrificó para dilatar los días del emperador, a quien se había hecho creer que alcanzaría larga vida si hallaba un hombre que quisiera dar su sangre en holocausto voluntario. Adriano aceptó el sacrificio, mas lloró inconsolable la muerte de su esclavo, dio el nombre de éste a una ciudad que hizo levantar a orillas del Nilo y consiguió que Grecia le divinizara. Le erigió templos y estatuas en diversas provincias del Imperio y le dio el nombre de una estrella que se había descubierto, diciendo que Antinoo había tomado esta nueva forma, y que él, Adriano, le había visto, cosa que por adulación repitieron sus cortesanos, sosteniendo que también ellos habían observado lo mismo. Los griegos llegaron a defender que el nuevo Dios pronunciaba oráculos que se sospecha forjaba el emperador. Los artistas más renombrados recibieron encargo de reproducir la imagen de Antinoo, que por orden del emperador fue adorado, después de su divinización, en todo el imperio, durando este culto hasta Valentiniano. El poeta español Prudencio, hablando del famoso esclavo, se burla así: «¿Que diré de Antinoo, colocado en la mansión celeste? Es objeto de delicia para príncipe-dios; reposa en el regazo de la púrpura real, despojado de su virilidad, y es el Ganimedes del dios Adriano; pero, en vez de presentar copas a los dioses, ocupa un puesto en el triclinio de Júpiter, se alimenta de ambrosía, bebe néctar divino y da oído con su esposo a los votos de los que concurren a sus templos». Según Winkelmann, todas las estatuas de Antinoo nos le presentan con grandes y bien dibujados ojos, perfil suavemente inclinado, boca y barba con una expresión de belleza ideal y rostro melancólico. Cítanse, entre las estatuas que le representan, dos que se reputan obras maestras: hállase una en el Belvedere del Vaticano, y fue descubierta en los baños de Adriano: la otra túvola el emperador a su vista en su posesión del Tívoli, y se encuentra hoy en la sala Hércules del Capitolio. Para algunos arqueólogos, aquélla sería un Mercurio y ésta representaría al esclavo bitinio con los atributos de Mercurio. Para muchos la figura de Antinoo, que se encuentra en multitud de medallas y piedras grabadas, recuerda la de Baco.
– ANTINOOS (de Antinoo): m. pl. Arqueología. Juegos con que se honraba en Bitinia al favorito del emperador Adriano. Eran quinquenales. También se celebraron en Mantinea donde tenía templo. |