Diccionario de Mitología (En Homero, La Iliada y la Odisea, Apéndice II – J. Pérez del Hoyo Editor. Madrid, 1970, pp. 523-550) |
APOLO Hijo de Júpiter y Latona y hermano gemelo de Diana. Nació en isla de Delos y, desde joven, tomó el carcaj cuyas flechas tan terribles eran en sus manos. Con ellas mató a la serpiente Pitón, que perseguía a su madre, y la piel del monstruo sirvió para cubrir el trípode en que se sentaba la pitonisa de Delfos para pronunciar sus oráculos. Hermosísimo y de radiante presencia, amó mucho y fue muy amado. De la ninfa Coronis tuvo a Esculapio, padre de la medicina, quien, valiéndose de sus artes, resucitó sin consentimiento de Júpiter a Hipólito, por lo que el padre de los dioses le fulminó con sus rayos. Furioso y dolorido Apolo, atravesó con sus dardos a los cíclopes, inventores de los rayos, por lo que su padre le arrojó del Olimpo. Condenado a vivir en la tierra, se refugió en casa de Admeto, rey de Tesalia, cuyos ganados guardó, siendo, por sus muchas gracias y entretenimientos, el encanto de los moradores de los campos. Habiendo osado Pan rivalizar con él en el tañer la flauta, tomaron a Midas, rey de Frigia, por árbitro; y habiendo éste dado la palma a Pan, por amistad, Apolo le castigó haciéndole crecer orejas de asno. También el sátiro Marcias quiso rivalizar con él, y habiendo aceptado que el vencido quedaría a merced del vencedor, Apolo le desolló vivo después de vencerle. Cuando Mercurio le robó los ganados que cuidaba, propiedad de Acimeto, Apolo pasó a servir a Laomedonte, rey de Ilo y padre de Príamo. En sus andanzas por la tierra ayudó a Neptuno a construir las murallas de Troya, sobre la que descargó mortífera peste por no haber recibido de Laomedonte el salario convenido. Amó a Dafne, que por no corresponderle fue metamorfoseada en laurel; a Clitio, que fue cambiada en heliotropo; a Climene, de la que tuvo muchos hijos; a Jacinto, transformado en flor por el dios, cuando habiéndole matado sin querer con un tejo, no pudo volverle a la vida. Reconciliado, al fin, con su padre Júpiter, éste le encargó el derramar la luz sobre la tierra y le devolvió todos sus atributos y prerrogativas. Apolo era el dios de los oráculos, de las artes, de la medicina, de la juventud y de los ejercicios gimnásticos. |
Diccionario de Mitología – APOLO |
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