De la voz griega empeiria. Con este término la filosofía empirista designa el conjunto de percepciones que sirven de fundamento y límites al conocimiento humano.
La filosofía de la ciencia suele afirmar que es fundamental para caracterizar a las llamadas «ciencias empíricas» y distinguirlas de las ciencias formales. Las ciencias formales (matemáticas y lógica, principalmente) pueden justificar sus afirmaciones apoyándose únicamente en pruebas racionales, sin el concurso de la experiencia; por su parte las ciencias empíricas (física, química, psicología…) deben partir de la experiencia y terminar en ella, como corresponde al método que emplean, el llamado método hipotético-deductivo. Para que una hipótesis sea científica debe ser contrastada o verificada con el concurso de la experiencia. Naturalmente, no se debe confundir experiencia con experimento: todo experimento se realiza en el marco de la experiencia pues en el fondo no es otra cosa que un conjunto de percepciones sofisticadas, pero no toda experiencia es un experimento. |