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PAU – Prueba de Acceso a la Universidad – Historia de la Filosofia – 1999-2000 – Examenes Junio y Septiembre

PRUEBA DE ACCESO A LA UNIVERSIDAD – HISTORIA DE LA FILOSOFÍA – EXÁMENES PAU

BACHILLERATO LOGSE – UNIVERSIDADES PÚBLICAS DE LA COMUNIDAD DE MADRID

Exámenes Junio y Septiembre

Curso 1999/2000

Junio

INSTRUCCIONES GENERALES Y VALORACIÓN

ESTRUCTURA: La prueba consta de dos opciones «A» o «B», cada una de las cuales incluye:

a) un texto y

b) cuatro cuestiones relacionadas con dicho texto.

INSTRUCCIONES: El alumno elegirá «A» o «B» y responderá a las cuestiones que aparecen al final de la opción elegida.

DURACIÓN: Una hora y media.

PUNTUACIÓN

Para la opción «A», las respuestas a las cuestiones 1ª, 3ª y 4ª podrán obtener una calificación máxima de 2 puntos cada una. La contestación a la pregunta 2ª podrá obtener hasta cuatro puntos.

Para la opción «B», las respuestas a las cuestiones 1ª y 4ª podrán obtener una calificación máxima de 2 puntos cada una. Las contestaciones a las preguntas 2ª y 3ª podrán conseguir hasta 3 puntos cada una.

OPCIÓN A

«Por «Dios» entiendo una sustancia infinita, eterna, inmutable, independiente, omnisciente, omnipontente, que me ha creado a mí mismo y a todas las demás cosas que existen (si es que existe alguna). Pues bien, eso que entiendo por Dios es tan grande y eminente que cuanto más atentamente lo considero menos convencido estoy de una idea así pueda proceder sólo de mí. Y, por consiguiente, hay que concluir necesariamente, según lo antedicho, que Dios existe. Pues aunque yo tenga la idea de sustancia en virtud de ser yo una sustancia, no podría tener la idea de una sustancia infinita, siendo yo finito, si no la hubiera puesto en mí una sustancia que verdaderamente fuera infinita.» (Descartes, Meditaciones metafísicas

En este texto Descartes (1596-1650) expone una de sus pruebas de la existencia de Dios.

1. Analizar la estructura argumentativa del texto propuesto.

2. Desarrollar el tratamiento del problema de la existencia de Dios en un autor de la Edad Moderna y enmarcarlo dentro del pensamiento filosófico de aquel autor.

3. Exponer la relevancia del problema de la existencia de Dios en el contexto histórico, sociocultural y filosófico de la Edad Moderna.

4. Explicar el tratamiento del problema de la existencia de Dios en un autor de la Edad Media.

 

OPCIÓN B

Gracias solamente al hecho de que el hombre se olvida de sí mismo como sujeto y, por cierto, como sujeto artísticamente creador, vive con cierta calma, seguridad y consecuencia. [… ] Le cuesta trabajo reconocerse ante sí mismo que el  insecto o el pájaro perciben otro mundo completamente diferente al del hombre y que la cuestión de cuál de las dos percepciones del mundo es más correcta carece totalmente de sentido, ya que para decidir sobre ello tendríamos que medir con la medida de la percepción correcta, es decir: con una medida de la que no se dispone. Pero por lo demás, la «percepción correcta» ―es decir: la expresión adecuada de un objeto en el sujeto― me parece un absurdo lleno de contradicciones, puesto que entre dos esferas absolutamente distintas, como son el sujeto y el objeto, no hay ninguna causalidad, ninguna exactitud, ninguna expresión, sino, a lo sumo, una conducta estética, quiero decir: un extrapolar abusivo, un traducir balbuciente a un lenguaje completamente extraño, para lo que, en todo caso, se necesita una esfera intermedia y fina fuerza mediadora, libres ambas para poetizar e inventar.»

(Nietzsche, Sobre verdad y mentira en sentido extramoral

Cuestiones:

1. Identificar la o las propuestas filosóficas del texto y citar la frase o frases que las recogen.

2. Relacionar el contenido del texto con el pensamiento del autor.

3. Relacionar el contenido del texto y el pensamiento del autor con el marco histórico, sociocultural y filosófico de su época.

4. Razonar las principales influencias recibidas y la repercusión posterior o la vigencia actual del pensamiento del autor.

Septiembre

INSTRUCCIONES GENERALES Y VALORACIÓN

ESTRUCTURA: La prueba consta de dos opciones «A» o «B», cada una de las cuales incluye:

a) un texto y

b) cuatro cuestiones relacionadas con dicho texto.

INSTRUCCIONES: El alumno elegirá «A» o «B» y responderá a las cuestiones que aparecen al final de la opción elegida.

DURACIÓN: Una hora y media.

PUNTUACIÓN

Para la opción «A», las respuestas a las cuestiones 1ª, 3ª y 4ª podrán obtener una calificación máxima de 2 puntos cada una. La contestación a la pregunta 2ª podrá obtener hasta cuatro puntos.

Para la opción «B», las respuestas a las cuestiones 1ª y 4ª podrán obtener una calificación máxima de 2 puntos cada una. Las contestaciones a las preguntas 2ª y 3ª podrán conseguir hasta 3 puntos cada una.

OPCIÓN A

141. Cuando empezamos a creer algo, lo que creemos no es una única proposición sino todo un sistema de proposiciones, (Se hace luz poco a poco sobre el conjunto).

142. No son los axiomas aislados los que nos parecen evidentes, sino todo un sistema cuyas consecuencias y premisas se sostienen recíprocamente

143. Me explican, por ejemplo, que hace mucho tiempo alguien escaló esta montaña. ¿Investigo siempre la fiabilidad de quien me lo cuenta y si la montaña existía hace años? Un niño aprende que hay narradores fiables y no fiables mucho después de aprender los hechos que se le cuentan. No aprende en modo alguno que aquella montaña ya existía hace mucho tiempo; es decir, ni tan siquiera se plantea la cuestión de si es así. Por decirlo de algún modo, el niño se traga esa consecuencia con lo que aprende.

144. El niño aprende a creer muchas cosas. Esto es, aprende por ejemplo a actuar de acuerdo con estas creencias poco a poco, se forma un sistema con las cosas que cree y, en tal sistema, algunos elementos se mantienen inmutables y firmes, mientras otros son más o menos móviles. Lo que se mantiene firme lo hace no porque intrínsecamente sea obvio o convincente, sino porque se sostiene en lo que le rodea.»

(L. Wittgenstein, Sobre la certera

En este texto Ludwig Wittgenstein (1889-1951) analiza el proceso de conocimiento y el carácter de nuestras certezas indicando cómo nuestros juicios y creencias forman un todo.

Cuestiones:

1. Analizar la estructura argumentativa del texto propuesto.

2. Desarrollar el tratamiento del problema del proceso de conocimiento en un autor de la Edad Contemporánea.

3. Exponer brevemente la relevancia del problema del proceso de. conocimiento en el contexto histórico, sociocultural y filosófico de la época contemporánea.

4. Explicar el tratamiento del problema del proceso de conocimiento en un autor de la Edad Moderna.

 

OPCIÓN B

«Ni en el mundo ni, en general, tampoco fuera del mundo, es posible pensar nada que pueda considerarse como bueno sin restricción. a no ser tan sólo una buena voluntad. El entendimiento, el ingenio, el juicio, o como quieran llamarse los talentos del espíritu, o el valor, la decisión, la perseverancia en los propósitos, como cualidades del temperamento, son, sin duda, en muchos sentidos. buenos y deseables; pero también pueden llegar a ser extraordinariamente malos y dañinos si la voluntad que ha de hacer uso de estos dones de la naturaleza, y cuya peculiar constitución se llama por eso carácter, no es buena.»

(Kant. Fundamentación de la metafísica de las costumbres, cap. I)

Cuestiones:

1. Identificar la o las propuestas filosóficas del texto y, citar la frase o frases que las recogen.

2. Relacionar el contenido del texto con el pensamiento del autor.

3. Relacionar el contenido del texto y el pensamiento del autor con el marco histórico, sociocultural y filosófico de su época.

4. Relacionar las principales influencias recibidas y la repercusión posterior o la vigencia actual del pensamiento del autor.