Fray Diego de Haedo, historiador español (biografía)
HAEDO (FRAY DIEGO DE
Biografías. Historiador español. Nació en el valle de Carranza. Murió en la primera mitad del siglo XVII. Era hijo de una antigua familia de Vizcaya, que pretendía remontar su origen hasta los tiempos de la invasión musulmana. Uno de sus parientes, de su mismo nombre, obtuvo el arzobispado de Palermo, y se distinguió por su caridad y otras virtudes. Llamado por este arzobispo, Diego, que había ingresado en la Orden de los Benedictinos, marchó a Sicilia, donde fue capellán y alcanzó la dignidad de abad de Fromesta. El palacio del prelado era el punto de reunión de los numerosos cautivos rescatados en África por el arzobispo. Tomando por fuente los relatos que éstos le hicieron, compuso Diego un primer ensayo acerca de Argel, y luego, según parece, marchó a los estados berberiscos, antes del año de 1605, pues esta es la fecha en que terminó su libro, que, en lo que se refiere a la estadística y la topografía, fue redactado teniendo a la vista documentos que difícilmente podrían facilitar los esclavos, teniendo en cuenta que no abundaban los cautivos de la calidad de Cervantes. Escribió Haedo su obra lentamente, y de seguro después de haber adquirido las mayores seguridades de que era cierto lo que se proponía contar. Por tanto, o visitó los lugares que describe u obtuvo memorias que le fueron comunicadas por los religiosos Trinitarios. No se limitó a describir los terribles sufrimientos de los cautivos, sólo conocidos hasta entonces por muy incompletas relaciones, sino que suministró noticias geográficas e históricas que se desconocían en absoluto. Hallábase en España cuando imprimió su libro, dedicado al arzobispo de Palermo, que, por la protección dispensada al autor, podía reclamar como propia una parte de la obra. Esta apareció con el siguiente titulo, generalmente alterado en las bibliografías: Topografía é historia general de Argel, repartida en cinco tratados, do se verán casos extraños, muertes espantosas y tormentos exquisitos que conviene se entiendan en la cristiandad con mucha doctrina y elegancia, dirigida al illustríssimo señor don Diego de Haedo, arzobispo de Palermo, presidente é capitán general del reyno de Sicilia (Valladolid, 1612, en fol. menor, a dos col.) Nueva, muy nueva la obra por el asunto, permaneció, sin embargo, desconocida, y solo más tarde la buscaron algunos curiosos, porque, impresa pocos años después de la publicación del Quijote, o, mejor, escrita en el mismo año en que vio la luz pública la primera parte de la inmortal novela, refería en estilo vivo y sencillo la historia de la audaz evasión intentada por Cervantes, y que contribuyó a abreviar su cautiverio. Haedo refiere el hecho, para eterna gloria del ilustre manco de Lepanto, como si se tratara de un hombre ignorado. Recogida en el siglo pasado por los biógrafos esta curiosidad do la historia literaria, el nombre de Haedo permaneció, sin embargo, en la oscuridad mas completa. La conquista de Argel por los franceses en la presente centuria ha devuelto al libro todo su valor. |
