PRIMERA PARTE Lección VI – Del ejército y las armas.
71. Según las notas dadas al Lord Macartney, embajador del rey de Inglaterra, ascendía entonces el ejército chino a un millón de infantes y ochocientos mil caballos.
72. La infantería lleva mosquete con mecha, del cual usa apoyándolo sobre una horquilla de hierro fija en el suelo; ejercitan también el arco con flechas, lanzas de diversas formas, y sable. La caballería usa de las diferentes armas blancas, y de ninguna de fuego; y se ejercitan particularmente en toda suerte de equilibrios sobre el caballo También hay artillería con su tropa correspondiente.
71. Hay tropas chinas y las hay de tártaros. Las primeras se distribuyen en las guarniciones de las plazas, ciudades y castillos, y las segundas permanecen reunidas en cuerpos a las órdenes de su general.
72. El modo de reemplazar el ejército es el siguiente. En cuanto a las tropas tártaras, todos los hijos de tártaros son soldados desde que nacen, y se mantienen del usufructo de ciertos territorios que les están asignados. Respecto de las chinas, los jóvenes son alistados, según el número necesario, en los cuerpos de sus provincias respectivas y permanecen libres todo el tiempo que no están empleados en el servicio, a excepción del de los ejercicios que tienen en las lunas nuevas. El oficio de soldado es lucrativo y pretendido; en tiempo de guerra reciben seis meses de paga adelantados, y sus familias disfrutan de una parte de su sueldo.
73. Los militares llevan un traje lujoso, que más parece de personajes de teatro que de soldados; y más cuidan de sus abanicos que de sus armas; pero los tártaros son mucho más duros y aguerridos que los chinos. El uniforme varía según las provincias entre los chinos; y es general entre los tártaros que conservan en la mayor parte su antigua costumbre.
73. El más cruel de los castigos que usan en el ejército para los chinos es el de los palos dados con cañas de bambú, y para los tártaros el del látigo.
74. La manera de disponer los generales su ejército y los nombres que dan a los diferentes cuerpos, varían en el orden según el capricho de aquellos. El emperador Koang-ti, dividió su ejército en seis cuerpos llamados el cielo, la tierra, las nubes, los vientos, la balanza del cielo, y el eje de la tierra; Tay-Koung, lo dividió en cinco cuerpos denominados como los cinco planetas. Otros generales han ordenado su ejército imitando las partes y formas del famoso Dragón o de la tortuga misteriosa.
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