NEPTUNO
Dueño de los mares y de todas las aguas, era hijo de Saturno y Rea y, por tanto, hermano de Júpiter. Su madre, apenas nació, le escondió en un aprisco de Arcadia para que no le devorase Saturno, ofreciéndole, en cambio, un potro, fruto, según le dijo, de su parto. En la división que Júpiter hizo de los elementos, le tocaron las aguas, es decir, el mar, las islas y las costas, y desde el fondo de aquél gobernaba su imperio con calma imperturbable. Según la fábula, él, ayudado por Apolo, construyó los muros de Troya. Como muestra de su poder y como arma llevaba el tridente, con el cual hendía las peñas y separaba las montañas. Marchaba sobre el mar mandando a las olas y a los vientos, sobre un carro tirado por caballos oscuros y de crines doradas. El mismo, en figura de caballo, tuvo con una Harpía a Arión, el caballo de batalla de Adrasto. |